No lo veo hasta que esta al lado mío, me doy cuenta que viene a mi busca, abre la puerta de mi oficina haciéndome ingresar a ella de una manera brusca, casi a empujones, pero que se cree este hombre?, que yo soy un animalito?, tiene que estar acostumbrado a ese trato con los animales, creo que tendré que recordarle con quien habla este trabajador. Mi mano derecha vuela a su mejilla izquierda, y él, con unos reflejos de águila, me sujeta la mano, y la aprieta para demostrar su fuerza, su enojo, su molestía, nosé qué, pero duele.
-Quieres que
te crea?- me dice todo prepotente, y con mi mano sujeta - yo aquí vine hacer mi trabajo, y no me voy a ir mientras no lo
termine- me dice totalmente molesto.
Lo miro con
desdén, lo más despectiva que puedo, pero con cierto miedo, no quiero que lo huela, quiero que se vaya, ya ha escarbado demasiado en mi pasado, es mejor la defensa antes de atacar, así que mi mente vuela en busca de una pregunta a modo de defensa en la que él quede invalidado.
-Y ahora,
que piensa de Luis Santelices?- No responde, eso es bueno, porque duda de lo que cree, no es que quiera que se pase a mi bando, siempre eh estado sola y es mejor así, nada ni nadie me dice lo que tengo o no tengo que hacer. -Ya veo no
tienes respuesta- y me libero de su agarre, ahora me siento más segura sin que me tenga sujeta. Ha servido mi táctica.
-Disculpa,
yo no sabía nada de eso, pero no soy quien para juzgarlo, es muy probable que
esa sea tu parte de la historia como tu la viste, no como la ve mi jefe.- Es buena respuesta, pero me enderezo, lo miro con furia y no es que pida que me crea, sino que se vaya a la mierda y me deje en paz, jamás nadie me ha cuestionado, porque siempre han confiado en mí, si, yo nunca lo eh necesitado confiar en alguien, claro hay excepciones, dos personas. Por qué me interesa que confíe en lo que yo le digo?, si el no es nadie en mi vida, más que un hombre que ha venido a escarbar en mi pasado, y a dejarme así tiritando y nuevamente a sentir desconfianza en todo.
Todavía está ahí, mirandome,la furia me gana y grito.
-QUEEEEEÉ!!!!
ÁNDATE O LLAMO A SEGURIDAD DE NUEVO- Llena de rabia le grito, quiero que se vaya, quiero que me deje tranquila, con mis fantasmas, con mis miedos y frustraciones, mientras le enseño la salida con mi bazo izquierdo.-Así que
vuelve a esa maldita finca y dile a Santelices que para mí ESTA MUERTO, que no
me INTERESA SI MUERE O NO, que por mi es mejor que este MUERTO, y que se quede
tranquilo que llevo este ASQUEROSO apellido y que no me lo eh quitado por amor
a mi abuelo, y para no olvidar que no debo creer en nadie- Sigo con el brazo en alto, quiero que se vaya me empieza a darme frío, van a empezar los escalofríos, no quiero sentirme insegura, así como me encuentro, así no soy yo.
Me mira furioso, y sé que esto no ha acabado seguiremos viéndonos, doy gracias a Dios que él se marcha. Doy un portazo, y empiezan los escalofríos recorrer mi cuerpo, me abrazo e intento reprimir un sollozo, porque sé que después vendrá el llanto, no me quiero sentir como es niña de quince que temía a todo, que desconfiaba de todo.
-Por el amor de Dios, dame fuerza, sé que existes en un lugar muy lejos de aquí, y aunque no me escuchaste hace unos años, me haz escuchado después, dame tregua por favor, no así todo de una vez, te lo pido - Digo mientras bajo la mirada, lleno mis pulmones para tranquilizarme, boto el aire, y comienzo a relajarme.
-Por el amor de Dios, dame fuerza, sé que existes en un lugar muy lejos de aquí, y aunque no me escuchaste hace unos años, me haz escuchado después, dame tregua por favor, no así todo de una vez, te lo pido - Digo mientras bajo la mirada, lleno mis pulmones para tranquilizarme, boto el aire, y comienzo a relajarme.
Ya más tranquila en mi oficina, gracias a la gritadera que le di a ese tal Alejandro me siento
mejor, es como si me sacará un peso de encima, aunque esperaba que me entendiera, pero bueno es mejor así, tengo como ese sentimiento de cuando
te clavas con una espina y por fin logras sacártela, te alivias pero aún te
queda ese dolor, y así estaba hasta que escucho que tocan la puerta de mi
oficina.
Veo ingresar a mi oficina a Roberto son su sonrisa en su cara.
Veo ingresar a mi oficina a Roberto son su sonrisa en su cara.
-Catalina,
y... cómo vas con lo Adrian, perdón Javier?- me dice sonriendo
-Ehhh,
disculpe se me había ido, pero ahora me pongo en curso y le tengo las cosas
listas- Comienzo a buscar de manera frenética en mi computador el archivo que estaba preprando par ese hijo de... Que no venga la rabia, pero es por el amor de Dios con este imbécil de Alejandro se me había olvidado el trabajo que tenía que hacer, así que manos a la obra. Comienzo a leerlo, no estoy concentrada.
-¿Qué pasa
Catalina? andas distraída- me mira con preocupación
-No jefe,
estoy bien- Es mi jefe no debo, porque preocuparlo con historias de mi
pasado, que no conoce y no tiene porque conocerla.
-Está bien,
pero apúrate que eso lo necesito para hoy.- Mierda todo tenía que ser hoy, hasta en la sopa me sales Santelices, me obligue a olvidarte y lo logré aún con este apellido recondandomelo día tras día, y hoy es uno de esos días en que no hubiera gustado nacer, pero aquí estoy sobreviviendo.
-Si, no se
preocupe hoy lo tendré listo- lo haré y eso me servirá para distraerme
Y después de
cuatro arduas horas, tengo el dichoso informe, Este hombre cada vez que escarbo
en su pasado, es más interesante, no pense que sería tan corrupto, pero mejor para nosotros, más de donde atraparlo.
Toco la puerta de
la oficina, pero como no contesta entro y me encuentro de frente a Alejandro,
pero que es lo que está haciendo aquí, si yo le había dicho que se fuera,
llamare a seguridad para sacarlo de aquí.
Me mira, y sonrie, no esta molesto, llamare a Seguridad es lo mejor.
Me mira, y sonrie, no esta molesto, llamare a Seguridad es lo mejor.
Cuando le habia dado la espalda, tenía la mano en la puerta para ir en busca de seguridad, escucho su voz en mi espalda.
-Hola, creo que empezamos mal, mi nombre es Alejandro Latorre- Al escucharlo me giro lentamente, creo que escuche mal, se qué mis ojos no me ayudan porque los tengo abiertos como platos. Y me pregunto mentalmente, ¿Cómo dijo Latorre? no será pariente de mi jefe?, porque si es así, menudo lío en el que me eh metido.
-Hola, creo que empezamos mal, mi nombre es Alejandro Latorre- Al escucharlo me giro lentamente, creo que escuche mal, se qué mis ojos no me ayudan porque los tengo abiertos como platos. Y me pregunto mentalmente, ¿Cómo dijo Latorre? no será pariente de mi jefe?, porque si es así, menudo lío en el que me eh metido.
-Eres
Latorre??...-Le digo sorprendida y el sonríe, como si hubiese ganado la
partida. Se abre la puerta y es mi jefe.
Con una sonrisa en sus labios como es la costumbre, al parecer no le ha dicho nada Alejandro o es que me esta jugando una broma para que afloje.
-Catalina, ya veo que conoces a mi sobrino Alexander- Lo miro como boba, finalmente cual es su nombre?, dijo sobrino, OH DIOS QUE HICE
-Catalina, ya veo que conoces a mi sobrino Alexander- Lo miro como boba, finalmente cual es su nombre?, dijo sobrino, OH DIOS QUE HICE
-Tío es
Alejandro, si mi madre te escuchará...-Mierda le dijo Tío. MIERDA. Esto no me gusta, Ay! Catalina tan impulsiva como siempre, porque no averiguaste primero quien mierda era.
-Uy! tienes
razón, después vendrá en la noche para destaparme las patas-y ambos ríen
como bobos.
-Veo que ya
conoces a Catalina, una gran abogada y mi mano derecha- y le guiña un ojo a ese Bicho, mientras lo dice me abraza, yo sonrió, pero lo miro seria, no
quiero que vea que estoy sorprendida con saber que es sobrino de mi jefe
-Sí...- no lo dice sorprendido, cómo si ya lo supiera.
-Disculpe
señor- interrumpo al imbécil -traigo el informe- le muestro la carpeta que tengo en mis manos agitandola en el aire para atraer su atención, y así es.
-Oh!, ya
veo, gracias, puedes irte- me dice complacido con la carpeta, tomándola y sumergiéndose en la lectura de ella, va a su asiento para poder leer con mayor detención el informe.
-Hasta
mañana- y salgo de la oficina de Roberto, sin más preámbulos, es mejor
así, es mejor correr antes de que Alejandro le diga todo lo que ha pasado con él, así que si me despide, tendré que actualizar mi curriculum, y ver a uno de mis clientes más lleno de problemas.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario